La palabra empalmarse no es ni muchísimo menos única de una poronga si bien siempre y en todo momento la usamos para decir que disponemos la verga mucho más dura que el palo de un barco, pero los clítoris asimismo se empalman amigos y no sabe hasta qué punto, todo es dependiente de de qué forma se lo piense. Indudablemente el marido de esta madurita sabe con perfección qué teclas tocar para llevársela a su lote y ella por supuesto se deja estimar, perdiendo totalmente la vergüenza y grabando vídeos porno caseros como este…
Qué es una región erógena?
Las ubicaciones erógenas son aquellas unas partes del cuerpo que tienen una alta sensibilidad y, siendo estimuladas, causan bastante exitación y excitación sexual. No hay un número preciso de zonas erógenas, en tanto que cambian según la persona y tenuemente entre hombres y mujeres. Al tratarse de zonas tan sensibles, cada cuerpo tiene una reacción de forma diferente al estimularlas. ¡Aun podrías hallar novedosas partes que nosotros no conocemos! Nuestro consejo es que te atrevas, aun puedes emplear un lubricante para intensificar la sensibilidad de la región. Todo es cuestión de evaluar y más que nada de comunicación tanto verbal como no verbal. A esto hablamos a que puede ser realmente útil que escuches y observes los movimientos de tu pareja sexual al alentar estas zonas. Y frente a la duda, siempre y en todo momento puedes hacerle una pregunta de manera directa cuáles son sus opciones.
De esta forma seguramente vas a dar al clavo.
Poseemos mucho más sexo para ti:
“En las relaciones entre lesbianas en ocasiones se pierde el contacto físico”
Existe el punto G ? ¿Qué es? ¿Dónde se encuentra en la mujer? ¿Y al hombre? ¿Qué posiciones hay para estimularlo?
Este “popular” punto es popular por ser una región muy erógena del cuerpo cuya estimulación vendría a generar mucho más exitación que la estimulación de cualquier otra región, clímax mucho más intensos y/o de hecho distintas. Como en todo, la verdad difiere algo de la teoría o lo que hayamos podido oír. Inicialmente el punto G fue únicamente localizado en el cuerpo femenino, descubierto por un ginecólogo apellido Grafenger, con lo que esta región recibió como nombre la inicial de su apellido. Según el doctor Grafenger, el punto G en la mujer está en la región posterior del pubis, cerca de la uretra, a unos 4 cm precisamente de la entrada de la vagina.
La verdad es que existen muchas mujeres que dicen poseerlo y que en el momento en que se les impulsa esta región específicamente dicen sentir bastante exitación. Otros, no obstante, no aprecian diferencia en relación a otras estimulaciones en distintas zonas.