Hace unos días, publicamos un producto sobre la Disfagia en la Patología de Parkinson, contrariedad para tragar o deglutir los elementos líquidos o sólidos por afectación de una o mucho más fases de la deglución.
En ocasiones esta perturbación en la deglución puede crear problemas en el tolerante así como:
Sugestión y temor frente a la oportunidad de atragantarse
Hay personas mucho más sensibles que otros en el momento de producir rechazo a los alimentos dependiendo del color, fragancia o pura sugestión. De manera natural puede ser mucho más bien difícil tragar ciertos alimentos. Según el nivel de temor y alarma se tienen la posibilidad de generar náuseas o vómitos. En el momento en que pensamos que un alimento puede producir algún inconveniente sobre nuestra salud, el desecho es automático y nos asiste a defendernos de una viable intoxicación. Evolutivamente este rechazo resguarda de envenenamientos y anomalías de la salud, lo malo es que en el momento en que el bloqueo de la glotis se genera por pura sugestión puede ocasionar inconvenientes, dejando de ser un mecanismo útil.
Si examinamos evolutivamente al humano, su supervivencia está condicionada a puntos como escoger adecuadamente qué alimentos se tienen la posibilidad de consumir y cuáles no, es una virtud competitiva. Puntos como la textura, el color, el sonido… tienen que ser parte de la decisión de los alimentos que tenemos la posibilidad de consumir.
Disfagia esofágica
Las causas de la disfagia esofágica son considerablemente más variadas que en la situacion previo, y las mucho más usuales son las próximas:
- Cuerpos estragos En varias oportunidades, alimentos u otros elementos tienen la posibilidad de hacer una obstrucción parcial en la garganta o el esófago. O sea muy recurrente en la gente mayores que, al llevar dentadura postiza o tener adversidades para masticar apropiadamente los alimentos, tienen mucho más peligro que al tragarse, un trozo de alimento se les quede atascado en la garganta o en el esófago.
- Anillo esofágico. Radica en el estreñimiento de la parte de abajo del esófago, lo que puede ocasionar adversidades a lo largo de la deglución de alimentos sólidos.
- Hernia de hiato. Sucede en el momento en que una parte del estómago empuja hacia arriba en el pecho.
- Dolencias que afectan al buen estado del esófago, como la acalasia, los espasmos esofágicos, la estenosis o la patología del reflujo gastroesofágico.
- Cáncer y tumores en la región del esófago y del estómago. También, como ocurría en la disfagia orofaríngea, las sesiones de radioterapia tienen la posibilidad de dañar el buen estado del esófago.