Entre los movimientos que nos acostumbra llamar la atención de los gatos es en el momento en que abren la boca en el momento de olfatear algo. Por la expresión de la cara (en ocasiones asimismo frunce el hocico) varias personas piensan que significa que no les agrada lo que huelen, tal y como si fuera un puaj. No obstante, este ademán no significa rechazo. Los gatos abren la boca en el momento en que huelen para llevar a cabo algo similar a «saborear» el fragancia.
Los gatos tienen los sentidos del olfato y del gusto muy desarrollados. De todos modos, es tal y como si tuviesen un tercer sentido, por el hecho de que tienen un olfato y un gusto afines a los nuestros, pero tienen un órgano particular que efectúa una fusión de los dos: el órgano de Jacobson. Para ponerlo en marcha, precisan tener la boca abierta y «palear» el perfume. Así mismo, con la boca tienen la posibilidad de sentir ciertas moléculas y feromonas presentes en, por servirnos de un ejemplo, la orina de otros gatos o en gatas en celo. En verdad, la detección de feromonas en la orina por la parte de este órgano es la encargada de esta práctica de ir oliendo pisos de otros animales, y el órgano de Jacobson deja a los gatos distinguir el sexo de otros gatos y entender cuándo una gata está a celo.
Órgano vomeronasal o de Jacobson
En contraste a nosotros, los gatos, tienen un órgano vomeronasal o asimismo llamado de Jacobson en la parte de arriba del paladar duro, que forma el techo de la boca. En el momento en que los gatos emplean este órgano, vea que se queda viendo a un punto fijo, con la boca abierta, el labio caído y la lengua hacia atrás. Esta mueca, (que por el hecho de que lo negaremos, siempre y en todo momento nos hace mucha felicidad), se le llama reflejo de Flehmen.
Pues en esta manera de olisquear la lengua es importante y juega un papel vital. Los fragancias se emiten de manera directa desde ella, hasta el interior del órgano vomeronasal, que paralelamente tiene comunicación directa con el hipotálamo y amígdala. Afirmemos que es un hatajo para atrapar y investigar otras moléculas químicas distintas (de enormes dimensiones) que les dan considerablemente más información. Más que nada, para advertir las feromonas, que son su mayor lenguaje químico, mediante las neuronas sensibles, ubicadas en esta pequeña cavidad guardada en el hueso de vómero, con receptores alojados en su paladar, tras sus incisivos superiores, y que además de esto, está comprobado que tienen una función fundamental en la conducta sexual.
Mi gato respira rapidísimo y no se desplaza
Habitualmente esto sucede en el momento en que el gato sufrió algún traumatismo. Por consiguiente, hablamos de una situación demasiado alarmante.
Hemorragias internas, fracturas, mal profundo o lesiones internas producto de una caída o golpe, tienen la posibilidad de perjudicar a la aptitud y el desempeño pulmonar de nuestros mininos.
Desea estar relajado
En ocasiones, en el momento en que deseamos tener nuestro gato en su regazo o jugamos de una forma un tanto inquieta con él lo que va a hacer es sacar la lengua, lamiéndose el nariz. Esta es una señal de tranquilidad de este animal que se utiliza para decir a la persona o peludo que tiene enfrente de que se relaje.
Asimismo puede verse bastante en gatos mayores en el momento en que un gato se los tira encima y no cesan de molestarlos. Si precisa mucho más información sobre el tema, lleve a cabo click aquí.