En una temporada tan particular como la de Semana Santa, hemos amado investigar sobre Jesús de Nazaret y los lenguajes que en aquella temporada charlaba. ¿Dónde él vivía se charlaban múltiples lenguas, pero qué idioma charlaba? y ¿cuántos charlaba?
En la Palestina del siglo I, Jesús se encontró a lo largo de sus largas travesías con gente que charlaba otras lenguas y dialectos, como el asdodeo, el samaritano, el fenicio, el árabe, el nabateo, el latín … Este último, si bien era el idioma oficial en Roma, no figura como idioma esencial en la vida de Jesús.
– Vasco.
El vasco pertence a los secretos preferidos de los lingüistas y también historiadores. Al no estar relacionado con ninguna lengua indoeuropea o romance (incluidos el español y la lengua francesa), más allá de que el País Vasco está entre España y Francia, ciertas teorías aun señalan que el vasco es una lengua que viene de Mali. Lo único claro es que en el momento en que los romanos llegaron al lugar, llevando el latín que después se transformaría en las lenguas románicas, ahora los vascos se daban las gracias diciendo “eskerrik asko”.
Integrante de la rama céltica de lenguajes indoeuropeos, el gaélico irlandés es el día de hoy hablado por un número parcialmente grande de irlandeses, y era hablado en las islas británicas bastante antes que las influencias sajonas acabaran de conformar lo que el día de hoy conocemos como la lengua inglesa. En verdad, mientras que el resto de Europa escribía en latín, en Irlanda se escribía en gaélico, lo que dejó que hoy día los contenidos escritos en lengua vernácula mucho más viejos de toda Europa occidental sean, exactamente, contenidos escritos irlandeses escritos en esa lengua.
El hebreo es un idioma viejo y único. Habiendo subsistido siglos de historia, al final fue revivido como un idioma moderno hace unos 150 años, y el día de hoy es el idioma oficial del Estado de Israel al lado del árabe y al inglés. Como idioma de la Biblia, el hebreo prosigue maravillando y también atrayente a personas en el mundo entero. Le acercamos diez datos que indudablemente no sabías sobre el idioma hebreo.
1. El hebreo es con frecuencia considerado un idioma sagrado (lashon hakodesh); varios ultra ortodoxos solo lo usan para la oración y en el día a día charlan otro idioma, como Idish por servirnos de un ejemplo.
Roma hace su aparición en el ámbito mundial
Hay una distinción bien interesante entre los lenguajes en desuso. Por una parte, están las lenguas extintas y, por otro, las lenguas fallecidas. Una lengua extinta no posee hablantes en ningún lugar de todo el mundo hoy día. Ni originarios. Ni religiosos. Ni escolásticos. En contraste, una lengua fallecida no posee hablantes originarios, pero todavía se emplea. Para objetivos rituales, por servirnos de un ejemplo. O en la educación, como el latín. El latín, la lengua de Roma, es una lengua fallecida. Pero, indudablemente, es lanzada como dardos en todos y cada uno de los tribunales de numerosos países en el mundo entero.
En todo caso, los romanos relevaron a los macedonios (la inclinación sigue…). En un inicio, las cosas eran pacíficas entre los romanos y judíos. Hasta el momento en que ciertas rebeliones provocaron que esta relación se desgastara. ¿El resultado? Roma cayó sobre Judea en el 70 y también.c., en el momento en que los judíos se sublevaron contra el dominio de roma. Y a pesar de que los judíos eran luchadores interesados y aplicados, absolutamente nadie podía llevar a cabo en oposición al poder de Roma.
Un corto paseo histórico por África y Asia
El hebreo y el arameo son 2 lenguas semíticas, esto es, pertenecen a la familia de lenguas afroasiáticas que desde el siglo X aC . se extendieron por distintos zonas de Oriente y África. El hebreo fue el primogénito de los dos, datando los primeros escritos del s. X aC El arameo nació un siglo después, si bien no tardó en alcanzarle el ritmo y continuar ganándole lote hasta el momento en que desde el siglo IV aC el arameo al final depone en el hebreo, la utilización del que se redujo a acontecimientos religiosos.
Se redujo de esta manera la rivalidad por el sitio de lengua vehicular a 2 bandos primordiales, el arameo y el heleno, que fueron por último apartados por la conquista árabe. Y todo semeja señalar que aquí acaba la crónica de ámbas lenguas.