Desaparece el término de igualdad plena para el español y el catalán en la Administración balear.
Ya que no. En este momento resulta que no. En la red social autónoma de las Islas Baleares (o Islas Baleares) desde el 7 de febrero (2016) la única lengua oficial en la Administración es el catalán (Ley 1/2016, de 3 de febrero). Por el momento no hay lenguas cooficiales (catalán y español), como se había predeterminado hace 4 años (Ley 9/2012, de 19 de julio). El Tribunal Constitucional (TC) lo ratificó un año después (STC 165/2013, de 26 de septiembre), como recojo en mi producto previo Lo constitucional: frente a la Administración, en catalán o en español, escoge el ciudadano. El TC respondía a un recurso de inconstitucionalidad planteado por cincuenta miembros del senado del Conjunto Socialista, pues en teoría la ley abría una vía por la que el catalán se transformaría en una lengua subordinada a la Red social Autónoma. No era de esta manera, según el TC. El presente gobierno socialista balear corrige en este momento lo que no le concedió el prominente tribunal. Y lo realiza con un interesante parágrafo en la Exposición de fundamentos donde asegura que con la Ley 9/2012 no se alteró la normativa previo de manera balanceada, sosiega y consensuada.
Para el legislador de en este preciso momento no enseña que el TC afirme que no hay un menoscabo o postergación del catalán en la Ley 9/2012 (FJ 11).
El español o español en Cataluña
Intentamos la tradición secular del español en Cataluña. Esto es evidente y no puedo mucho más que compartirlo con los entendimientos que tengo, pero no lo veo de esta manera que se muestra en el producto referido.
Desde el instante en que Castilla se realizó capacidad hegemónica en la península, como pasó toda la narración de la raza humana en el mundo entero, su lengua resultó mucho más interesante para la multitud de otros territorios. Pensamos hoy día en inglés.
Virtudes de la globalización
En la cara amable de la globalización se tienen la posibilidad de conseguir las señales que caracterizan a las sociedades mucho más modernas: integración y sencillez de las comunicaciones, libre movimiento de mercancías o extensión de los derechos humanos. Son signos de modernidad que definen a los países desarrollados y mejoran la vida de sus ciudadanos.
Si hay un aspecto en el que se hizo aparente la globalización es el de las tecnologías de la comunicación. La irrupción y consolidación de las comunidades y la oportunidad de entrar en contacto en el mismo instante con cualquier una parte del mundo fueron 2 de sus claves.